En los campamentos de francés se compaginan el aprendizaje del francés y la diversión. Por este motivo son una opción positiva para tener en mente si estás organizando las vacaciones de este verano para tus hijos. En ellos se combinan las clases teóricas con actividades de entretenimiento dentro y fuera de las instalaciones del campamento.
Como en todos los de idiomas los alumnos son divididos por grupos según su nivel en en francés y su edad. Así cada uno puede aprender a su ritmo, realizar actividades de su interés y hacer amigos afines.
En cuanto al aprendizaje del francés, las clases teóricas son impartidas por profesores nativos. También monitores con alto nivel en este idioma acompañan a los niños en el resto de actividades del día a día. Estos además se aseguran de que los alumnos se comuniquen en francés todo el tiempo.
En Campamentum la gran mayoría de campamentos de francés que se ofrecen están situados en zonas del interior de la península. Por esta razón la mayoría encajan en las modalidades de multiaventura, de naturaleza y deportivos.
En este tipo de colonias, tanto niños como adolescentes lo pasan en grande y viven unas semanas inigualables. ¿Quién no disfruta del verano haciendo rutas de senderismo en plena naturaleza, tirándose en tirolina, practicando rappel o participando en juegos de orientación y rastreo en parajes naturales preciosos?
En los campamentos de verano en francés no todo son clases teóricas. A pesar de que se trata de mejorar el nivel en el idioma, los pequeños aprenden muchas cosas más. Muchos niños no quieren ir a este tipo de colonias temiendo pasar un verano aburrido estudiando y cuando estas acaban… resulta que ¡no quieren volver a casa!
Durante su estancia en el campamento tus hijos harán grandes amistades y vivirán muchas experiencias nuevas. Pasar una parte de sus vacaciones separados del ámbito familiar les ayudará a ser más independientes y a tomar decisiones por sí mismos.
Además de mejorar su francés los pequeños también aprenden valores muy importantes. La solidaridad, el trabajo en equipo, el compañerismo y la autosuficiencia son algunos ejemplos de ello.
Anímate a echar un vistazo a los campamentos de francés para este verano. Tus hijos volverán con las pilas cargadas y con un montón de cosas nuevas que contar. No solo no se arrepentirán, sino que ¡querrán volver cada verano!